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UNA FIESTA RURAL , Tema escrito por Guilver Salazar

La mayoría de las comunidades rurales de Esquipulas celebran su fiesta comunal, dedicada a un Santo Patrono.  Una de estas comunidades es: Belén.

La aldea Belén, dista de Esquipulas como a tres kilómetros y medio, y para llegar a ella se debe tomar la carretera antigua, la misma que conduce a la famosa Piedra de Los Compadres.

Belén, está conformada por cuatro caseríos: Chiramay, La Ruda, El Zapote y El Tablón.  Precisamente El Tablón concentra la mayoría de casas de esta comunidad, la que cuenta con unas seiscientas familias aproximadamente.

Esta aldea celebra su fiesta patronal, en honor a San Miguel Arcángel, los días 27, 28 y 29 de septiembre.

La actividad principal de la fiesta lo constituye la novena a su Santo Patrono, la que inicia el 20 de septiembre.  Asimismo, en el oratorio de la comunidad se lleva a cabo, el 29 de septiembre, una misa solemne y, previo a ella, la precesión de San Miguel, acompañado del Patrón Santiago, quienes recorren la calle principal de la comunidad, acompañados de toda la feligresía católica local y personas que de la ciudad de Esquipulas acuden para participar  en dicha procesión, en donde se destacan estas dos imágenes de mucha tradición en nuestro pueblo, y las que van rodeadas de olorosas y coloridas flores, el humo del incienso, los cantos religiosos y la quema de bombas y cohetes de vara, dándole el toque de fiesta, tradición y alegría.

Es importante hacer notar que en Belén hay tres imágenes de San Miguel Arcángel.  La primera es muy antigua, ya que tiene más de cincuenta años de permanecer en la comunidad, y cuyo origen se pierde en el tiempo, escapando de la memoria de sus moradores, la fecha de su llegada y su lugar de origen, y la cual permanece en poder de la Cofradía del lugar.  También está la imagen que se venera en el oratorio de la localidad, misma que fue obsequiada por don Rolando Espinoza, propietario de Hotel San Judas, quien después de recibir un favor especial de San Miguel, prometió que llevaría dicha imagen a la aldea Belén, habiendo cumplido tal promesa, hace más o menos tres años.  Y la tercera imagen es un San Miguel más pequeño, al que todos denominan “El Peregrino”, dado a que, cuando los vecinos del lugar quieren rezar un rosario o hacer una novena, solicitan a los miembros de la cofradía que les permitan llevar esta imagen al seno de su hogar.

La Cofradía de San Miguel Arcángel, de aldea Belén, es una de las más antiguas de Esquipulas.  En la actualidad está conformada por varios miembros, dentro de los cuales se encuentra el mayordomo primero, cargo que ocupa actualmente el señor Francisco Cruz, y según la organización de dicha cofradía, pronto será sustituido por don Saúl Jacinto.

El oratorio de Belén está casi en la entrada al caserío principal denominado El Tablón.  Este oratorio fue construido por iniciativa del señor Servio Umaña, con el apoyo de un comité conformado por varias vecinos, dentro de los cuales se encontraba Guillermo Díaz Tovar, Hugo Nájera López y don Manuel Pérez.  Dicho oratorio fue construido en un terreno donado por la municipalidad de Esquipulas, y el cual, a un principio fue construido de piedra y adobe, y al que se le hizo recientemente una ampliación de block.

Dentro de los atractivos de la comunidad de Belén está la famosa Piedra de los Compadres y una pequeña laguna natural a la que todos llaman por el nombre de “Laguna Verde”, la cual tiene, aproximadamente, cincuenta metros de diámetros.  Dicha laguna permanece con agua invierno y verano, y aunque nadie la utiliza para bañarse, es muy visitada por los amantes a la pesca, pues a decir de ellos, la Laguna Verde tiene buen pescado.

Aparte de lo anterior, la aldea Belén se caracteriza porque, al llegar a la parte en donde inicia el caserío, se puede observar una de las vistas panorámicas de la ciudad de Esquipulas más extraordinarias.  En Belén, es casi una obligación detenerse para aprovechar la altura de su suelo y contemplar la imponente Basílica y sus incontables construcciones que le rodean.

De igual manera, Belén se caracteriza por el cultivo de la caña, tanto que, desde hace muchos años, quienes visitan la Piedra de los Compadres, no pueden regresar sin antes haber saboreado un delicioso jugo de caña, extraído de manera artesanal por algunos vecinos del lugar.  Y es que en Belén, la caña de azúcar se ha constituido en su cultivo principal.  Y, cuando se menciona éste producto, a la memoria de la gente viene un suceso curioso pero lamentable.  Cuentan los vecinos que, aprovechando la cantidad de caña que se cultiva en el lugar, los moradores solían hacer las famosas moliendas de donde elaboraban el dulce de panela y los sabrosos batidos.  Pero en una ocasión, cuando en una de esta moliendas del lugar, se procedía a “pichachar” la miel, quien efectuaba este trabajo, por el cansancio de varios días y noches de trabajo, se durmió, y lamentablemente se fue de bruces dentro del perol de miel hirviendo.  El infortunado señor fue sacado con vida, pero tres días después, dejó de existir. Las moliendas se continúan haciendo, aunque ya no como en años atrás, pero a raíz de esa experiencia, se tiene el cuidado de no poner a trabajar con “la pichacha” a quienes se han tenido que desvelar.

Aldea Belén es pues, uno de esos bellos rinconcitos rurales de nuestra Esquipulas, cuyo hermoso nombre nos recuerda el lugar en donde nació nuestro Señor Jesucristo.  Sin embargo, no fue posible determinar la razón por la cual, a esta comunidad se le llama Belén.

 

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