MILAGROSO SEÑOR DE ESQUIPULAS
«MILAGROSO SEÑOR DE ESQUIPULAS»
El escritor chiquimulteco Jorge Arquimides Manchamé Palma escribe la siguiente nota para todos los lectores de nuestraesquipulas.com «Milagroso Señor de Esquipulas«, obra de teatro edificada por el escritor chiquimulteco Fray Milton Alirio Jordán Chigua, dedicada a los 250 años de la construcción de la Basílica y a los 50 años de presencia benedictina en Esquipulas, Chiquimula, en la celebración del Año Santo Jubilar del 4 de enero del 2009 al 4 de enero del 2010. Pinceladas Bíblicas del Evangelio, en el 2003, Introducción General a la Sagrada Escritura, Y Milagroso Señor de Esquipulas, en el 2009, con esta dedicatoria: «Para mi estimado amigo Prof. Jorge Arquímides Manchamé Palma, con mucho aprecio y respeto Fr. Milton»
La obra es histórica, didáctica y educativa, Fray Miltón entregó su obra al Abad Héctor Sosa Paz y al padre Hugo López y estos a su vez buscaron 20 voluntades para poner en escena la portentosa obra «Milagroso Señor de Esquipulas».
El destape inaugural de la obra fue el 15 de febrero del Año Santo Jubilar, en el Salón de Convenciones «Abad Gregorio Robeau» de Esquipulas, Chiquimula.
La obra fue presenciada por unas 900 personas, incluyendo al Abad Héctor Sosa, Padre Hugo López y Fray Milton Jordán y el resto de monjes benedictinos, al finalizar la obra, el público se paró y premió a los actores con un prolongado aplauso, seguidamente, subió al escenario para felicitar a cada uno de los personajes con apretones de manos, besos y abrazos por el magnífico actuar, Fray Milton, me ha dedicado 3 obras asi:
La obra de teatro «Milagroso Señor de Esquipulas», es el mejor regalo de amor y esperanza que ha recibido el Cristo Negro y su Basílica, la Comunidad Benedictina en su conjunto y el noble pueblo esquipulteco.
Medio siglo y un poco más, tenía Esquipulas de no ver teatro de la calidad y profesionalismo, como el que vio el 15 de febrero en la obra: «Milagroso Señor de Esquipulas».
En la presentación inaugural de la obra, el Abad Héctor, Rector de la Basílica de Esquipulas, le dijo al autor entre otras cosas esto: «Padre Milton, Dios te bendiga y sigue escribiendo y compartiendo este Don que Dios te dio»
Mi inclinación reverente para Fray Milton, mi agradecimiento profundo, para el Monje Franciscano que ofrendó para Esquipulas su sentimiento y pensamiento en su obra «Milagroso Señor de Esquipulas».
Con ternura cristiana,
Jorge Arquímides Manchamé Palma
